Por cada alimento de origen animal que consumimos hay una media de 5 veterinarios que han trabajado para verificar que ese alimento es seguro. Estos profesionales llevan a cabo trabajos de inspección y asesoramiento en los puestos de control fronterizo. De igual modo, trabajan en las fábricas de pienso, en las ganaderías y mataderos, en el transporte de animales y de sus productos. Además de en la industria alimentaria y en los puntos de venta y consumo de alimentos, como lonjas, plazas de abastos, supermercados o restaurantes.
Los veterinarios son los encargados de garantizar la sostenibilidad ganadera, asegurando el bienestar y la salud de los animales. También de optimizar la utilización de los recursos de la ganadería y minimizar su impacto en el medio ambiente. Formulan la alimentación y manejos adecuados para cada animal y estado productivo.
Esta sea quizás la faceta más conocida del veterinario para la sociedad. Nuestras mascotas han pasado a ser parte de nuestra familia y no podemos confiar su cuidado a nadie mejor que a un veterinario. Ellos nos van a recomendar la mejor alimentación, un adecuado plan vacunal y de desparasitación y unos hábitos correctos para nuestras mascotas. Además, van a ser los encargados de tratar las enfermedades que puedan aparecer, protegiendo a toda nuestra familia.
Recuerda el concepto ‘ONE HEALTH’. Está basado en la relación que hay entre la salud animal, la medioambiental y la humana. Ahí los veterinarios son una pieza clave para que la sociedad esté protegida, creando barreras que, desafortunadamente, la mayoría de las veces son invisibles. Hasta que algún patógeno consigue romperlas y ocasiona un brote de zoonosis, que pueden transmitirnos nuestras mascotas y especies ganaderas y que son controlados mediante la vacunación, desparasitación y programas de erradicación. Evitar toxiinfecciones también es labor de estos profesionales, lo que consiguen gracias a las inspecciones y al asesoramiento que llevan a cabo periódicamente. La investigación de medicamentos y vacunas de uso humano también forma parte de su día a día. Su trabajo y vigilancia convierte a esta profesión en un verdadero escudo protector para el planeta y sus habitantes.